MALDITO FACEBOOK

Me acuerdo que en el mes de junio del año pasado, mis compañeritas del master llamaban a todos los miembros graduados del mismo suscribirse a este servicio para estar en contacto.

En un principio lo vi como algo interesante y bien pensado para estar en contacto, me dije a mi mismo "mismo, al fin un sistema de comunidad internet con todo en un mismo lugar y accesible".

Le seguí la corriente al fenómeno, incluso me suscribí con una de las cuentas de correo de la oficina y me dejé llevar. Reconozco que me he descubierto revisando las fotos de gentes que no conozco, mirando su intimidad sin tapujos ni barreras, me he informado de acontecimientos de terceros, he sabido de las penas y sacrificios de algunos y me he suscrito a grupos de protesta y de presión.

¿Ha servido todo esto? No, maldito facebook.

Le pregunté a un amigo que entiende cómo funcionan los misterios de la internet dónde parará este fenómeno, y su respuesta fue que the sky is less than the limit. La razón era sencilla según me dijo mirándome a los ojos: estos sistemas son como cuadernos en los cuales el autor sólo se ocupó de las portadas, del formato de las hojas, del empastado y del grosor; el resto, corre por cuenta de los usuarios.

Ya decía yo: no imaginaba al creador de este sistema inventando esa tontera de kill bill y el oso marica o las campañas para recolectar firmas o cuanta otra cosa se les ocurra.

Hago un ejercicio estilo facebook en mi cabeza e imagino una ciudad: en un principio todo era orden y tranquilidad, nada de persecusiones diarias, todo en su lugar, pero cuando llegan los habitantes se desata el descontrol, cada uno comienza a hacer lo que más le gusta, se miran y fizgonean entre ellos, se invitan a ciertas actividades, emprenden campañas de ayuda, se redescubren luego de llevar muchos años separados, se transfieren archivos, se recetan remedios y direcciones, de desinvitan a ciertas actividades; y ¿qué pasó con el orden que había en el principio? no queda nada de eso, a todos se les olvidó y luchan por conservar su orden en su metro cuadrado.

Por todo lo anterior maldita seas facebook, has sido capaz de replicar en un sistema lo que la sociedad es en su esencia, notable su creador, quizás algún día se me ocurra algo así.

¿Que vendrá después que facebook sea un monstruo incontrolable y de poderío aún mayor a los sistemas de inteligencia de todas las policías del mundo? No lo sé, solo facebook y sus servidores tienen la última palabra.