PARA DEJAR DE FUMAR

Me compré un libro para dejar de fumar, y de a poco me ha ido cambiando la concepción del vicio.
Entendí finalmente que no es un hábito, sino una adicción y que huele, sabe y se ve mal, muy mal. La DOminga me insiste inteligentemente que es malo, y cada dia que pasa me voy convenciendo que así lo es. Tanto así que ya el pucho mañanero me produce un poco de verguenza fumarlo por que me quita el olor a limpio, y al acostarme es como hacerlo con un cenicero en la boca (y en las manos también).
Ya empecé a lavarme el cerebro, y creo que voy por el camino correcto, no he comprado puchos desde que llegué a Chile pues quiero dejar de fumar al fumarme los últimos que me adquirí en el duty free.
Queda poco.
Para paliar la falta de vicio creo que me premiaré y compraré algo para que me recuerde día a día que es esfuerzo no ha sido en vano.
El cuento de la zanahoria y el conejo: muéstrale la zanahoria para que el conejo corra a encotrarla.

Comentarios

Tere Díaz dijo…
Buena ignacio!!! Yo dejé de fumar hace 1 año y de verdad que fue la mejor decisión que pude haber tomado. El perfume dura todo el dia en la ropa, la comida y los olores son nuevos y uno se siente sano andando por la vida.